PCC

Gente - Autenticidad

Tradiciones culturales y sociales alrededor de la producción del café

Los elementos propios de adaptación social a un único uso de la tierra y el desarrollo de tradiciones culturales y sociales altamente específicas extendidas alrededor de la producción del café demuestran el valor universal excepcional del sitio. Los valores sociales colectivos que constituyen la singularidad del PCCC promueven un desarrollo humano activo y sostenible en el paisaje cultural.

El amor por la tierra y la cultura

Uno de los elementos más destacados de la idiosincrasia de los cafeteros de la región es su valoración del paisaje y del cafetal como elemento constitutivo del mismo.

La finca por ejemplo es vista y cuidada como un “jardín” en el que el cafetal es la flor principal. De esta manera es presentada a vecinos, visitantes y forasteros con un orgullo único que refleja el gran esfuerzo y dedicación de las manos cafeteras en el trabajo de su tierra.

En el caso de los bienes inmuebles, la identificación de la población con sus tradiciones y su apropiación de ese patrimonio ha reemplazado a otras herramientas de gestión, como las normativas específicas, lo que ha redundado en una conservación sostenible de dichos elementos.

También es conservada, de manera natural, la arquitectura rural asociada al cultivo y al beneficio del café y las áreas naturales protegidas que circundan las plantaciones de café y que equilibran los ecosistemas de la región.

La actividad turística, que ha registrando un aumento considerable en los últimos años, ha estimulado este compromiso comunitario de protección y conservación del conjunto paisajístico de una manera integral, en la medida en que este se ha basado precisamente en el carácter rural, la belleza natural y la autenticidad cafetera del paisaje.

El amor por la tierra y la cultura

La autenticidad de la cultura generada a partir de la actividad cafetera se expresa también en diversas formas de patrimonio inmaterial, tales como las fiestas, el atuendo, la gastronomía y las artesanías.

Entre las fiestas se destacan aquellas asociadas directamente al café, como las Fiestas Nacionales del Café, la Fiesta del Canasto y las Fiestas de la Cosecha. Igualmente, la región es cuna de otras fiestas, ferias o festivales que promueven la música, el folclor tradicional, el fervor religioso o la herencia indígena o española.

Por su parte, el atuendo de los campesinos y la gastronomía revelan la autenticidad de la cultura regional, en la medida en que han persistido desde la fundación de los poblados.

Finalmente, entre las artesanías sobresalen algunas asociadas con el café, como el sombrero de Aguadas, o con otras especies de la región, como la guadua, y con productos alimenticios típicos. También hay “obras maestras de la artesanía regional” en la arquitectura, representadas por los trabajos ejecutados en madera, específicamente en portones, puertas, ventanas y balcones de las edificaciones.

Espíritu y sensibilidad

El espíritu o temperamento de la población de la región donde se localiza el PCCC está estrechamente relacionado con la cultura cafetera y puede diferenciarse fácilmente del que tienen habitantes de otras regiones del país.

El cultivo del café ha contribuido a consolidar esa cultura regional. Es de resaltar que como símbolos de identidad regional, se encuentran el ánimo por el trabajo, la capacidad empresarial, la propensión al riesgo, la independencia y la audacia; todos relacionados estrechamente con el desarrollo de la economía cafetera.